En acto que contó con la presencia del presidente de la República, Tabaré Vázquez, y del intendente de Montevideo, Ricardo Ehrlich, el titular de la empresa Cutcsa, Juan A. Salgado, presentó algunas de las modernas unidades que serán destinadas a cumplir, desde hoy mismo, servicios de los llamados diferenciales.
Estos buses comienzan a operar con una gran novedad: les ha sido incorporada tecnología de punta con el objeto de agilitar la circulación de los pasajeros y así lograr, junto a otras mejoras, servicios más rápidos. De los recorridos diferenciales, estos cambios se extenderán a todos los demás.
El elemento central del naciente sistema es el pasaje electrónico, que se concretará a través de tarjetas inteligentes prepagas o de tiques a ser adquiridos en el propio rodado. En todos los casos, desaparecen el guarda y el boleto tradicional en un proceso que permitirá a todos los pasajeros ir accediendo a la nueva modalidad. Se ha indicado, por otra parte, que su simplicidad anulará cualquier dificultad de aprendizaje.
Estamos ante una conquista largamente esperada por los usuarios del transporte capitalino. Con ella, Montevideo da un salto de años en materia de modernización, convoca a los pasajeros a responder a un cambio en sus costumbres y contribuye a solucionar otro problema reciente: el de la seguridad de personal y pasaje, ahora amenazada por robos reiterados. Si la renovación general de las flotas fue, en 1992, un hito en la mejora de la calidad de vida montevideana, bien puede decirse que este no le va en zaga.
