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A los DT de la casa siempre les fue mal; esta es la peor campaña de los últimos 23 torneos

DANUBIO ANTEPENÚLTIMO

A Gustavo Dalto le ocurrió lo mismo que a los anteriores técnicos “de la casa” que dirigieron a Danubio en los últimos 20 años: todos fueron cesados sin poder terminar su contrato, y todos llegaron al cargo con antecedentes exitosos dentro del club; Rafael Perrone, Daniel Martínez y Gustavo Dalto en las divisiones juveniles y Roberto Roo como Gerente Deportivo. De los cuatro, sólo Perrone volvió a trabajar, conduciendo desde hace años “La Escuelita”.

El primero fue Perrone, cesado durante el Apertura 1994 tras 7 partidos (4 empates, 3 derrotas y sólo 3 goles convertidos) cuando iba penúltimo, superando a Bella Vista por un punto.

Luego le ocurrió a Daniel Martínez en 2002. en el Clasificatorio, faltando 3 fechas ya no tenía chance (estaba 6° a 5 puntos del líder) y dirigió el Apertura completo quedando 7°, pero ya en la 4ª fecha y faltando 5 por jugarse no tenía ninguna chance pues iba a 9 puntos del líder; y finalmente terminó a 14 (Nacional 25, Peñarol 21, Fénix 18, Maldonado 14, Wanderers y Defensor 12, Danubio 11).

Roberto Roo pasó de Gerente Deportivo a técnico cuando Gregorio Pérez decidió alejarse tras el Apertura 2003. Roo dirigió en el Clausura y fue despedido tras la 14ª fecha al caer 0-4 con Tacuarembó en Jardines. En ese momento Danubio estaba 9° (ganó 5, empató 6 y perdió 3) con 19 puntos, a 11 del líder Peñarol.

Ahora le tocó a Dalto, que deja al equipo antepenúltimo (14°) a 17 puntos del líder del Clausura y a 15 de quien va 1° en la Anual.

LO PEOR EN 10 AÑOS

Este Clausura 2008 es lo peor de los últimos 23 torneos de Danubio. Después de un penoso penúltimo puesto en el Apertura 1998 dirigido por Castelnoble, La Franja estuvo entre los cuatro primeros puestos en 19 de los 23 campeonatos jugados en los últimos 10 años. Las excepciones fueron el Clausura 1998, cuando comenzó el ciclo de Fossati, que salió tercero pero quedó 5° por diferencia de goles, y en los otros tres casos fue cuando la directiva de turno decidió cesar a un técnico antes de finalizar el contrato. En el Apertura 2002 fue 7° en el Apertura y se cortó el ciclo de Daniel Martínez; en el Clausura 2003 terminó 8°, dirigido por Roberto Roo hasta que fue cesado y asumió Keosseian que dirigió las tres últimas fechas; y en este Clausura 2008 marcha antepenúltimo (14°) y aunque gane los 5 partidos que restan no llegará a meterse entre los cuatro primeros.

En el Apertura 1998, con Castelnoble, Danubio terminó penúltimo (11°) con 3 victorias, 2 empates y 6 derrotas, sumando 11 puntos de 33 posibles, el 33% del total, el mismo porcentaje que en este torneo con Dalto. En aquel Apertura de hace 10 años, Danubio sufrió una histórica goleada de 7-1 ante Nacional, y aunque ganó el clásico a Defensor (igual que Dalto) Castelnoble cerró su ciclo con 2 empates y 2 derrotas, sin convertir goles en esas 4 fechas finales.

El ciclo de Gustavo Dalto duró 10 meses y 6 días

En la noche del jueves 14 de junio de 2007 la directiva designó a Gustavo Dalto como DT del plantel principal, tras 7 años dirigiendo exitosamente en las formativas: “Mi objetivo siempre fue llegar a dirigir en Primera, no quería apurarme y este desafío es muy grande, y también lo es para los dirigentes que se juegan una parada enorme”, expresaba el flamante DT. El presidente Del Campo auguraba que “ya dirigió a varios de estos jugadores y ese conocimiento es muy importante para sortear ese período de adaptación que hubiera sufrido otro entrenador”.

Sin embargo, Dalto no dio demasiadas oportunidades a los juveniles que conocía. Antes de iniciar este semestre nefasto argumentaba que “hay jugadores que todavía no están preparados para jugar en Danubio, hay que llevarlos despacio. No hay que olvidarse que la exigencia actual de Danubio no es como era en años anteriores por lo que hay tratar de ser cuidadosos en ese sentido y no apurar los plazos para que el jugador cuando llegue pueda competir de la mejor forma”. El pasado domingo en el programa Vamos Danubio Todavía (Sport 890), Arturo Del Campo explicaba la decisión: “Analizando la realidad y con la información de lo que se ha hecho hasta ahora pensamos que era muy difícil revertir el momento, con un bajón pronunciado no sólo en lo futbolístico sino también en lo espiritual; vimos un Danubio sin ideas, sin fuerzas, sin ganas, sin temple”, agregando que “desde comienzo de año el período es absolutamente deficitario”. Sobre la designación de Lasarte opinó que “la idea es que haya un cambio, que dé un nuevo aire, un sacudón a lo que está pasando, y poder revertir este muy mal momento, porque tenemos jugadores de categoría y de ninguna manera podemos estar antepenúltimos en la tabla”. Del Campo confesó que “El ‘Rata’ estaba con ganas de seguir, veía que podía revertir esto, pero los dirigentes somos los que tenemos que tomar las decisiones, a veces desagradables como esta, porque Gustavo es una persona querida, de la casa”. Sobre la elección de Lasarte explicó: “Se manejaron cuatro nombres, quedaron dos, y finalmente por unanimidad se eligió a Lasarte (hasta junio 2009), por su personalidad, inteligencia, experiencia; a priori lo vemos como la persona indicada para revertir esta situación” y admitió que “la destitución de un técnico es la constatación del fracaso de un técnico y también de una directiva”.

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