Tiroteo masivo en Nueva York deja cuatro muertos, incluido un oficial de policía
Nueva York volvió a ser escenario de una tragedia este lunes por la noche cuando un hombre armado abrió fuego dentro de un edificio de oficinas en Midtown Manhattan, dejando un saldo de cuatro personas muertas, entre ellas un oficial de la Policía de la ciudad. El autor del ataque, identificado como Shane Devon Tamura, de 27 años y originario de Las Vegas, fue abatido por las autoridades tras el tiroteo.
La comisionada de la Policía de Nueva York, Jessica Tisch, ofreció una conferencia de prensa en la madrugada del martes, en la que detalló el desarrollo del ataque y confirmó la identidad del tirador. Tamura ingresó al edificio ubicado en Park Avenue poco después de las 9:00 p.m., armado con un rifle semiautomático. Según los informes preliminares, comenzó a disparar de manera indiscriminada en el vestíbulo, provocando escenas de pánico entre los empleados y guardias de seguridad.
Un ataque metódico y mortal
Luego de descargar su arma en la planta baja, Tamura accedió al ascensor y subió hasta el piso 33 del edificio, donde continuó con su ataque. Testigos aseguraron haber escuchado entre 15 y 20 disparos más en esa planta, la cual alberga varias oficinas privadas. Las autoridades informaron que el tirador parecía tener conocimiento previo del lugar, aunque aún no se confirma si tenía vínculos con alguno de los ocupantes del edificio.
Entre las víctimas fatales se encuentra Dirarul Islam, un oficial del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) de 36 años, quien se encontraba cumpliendo funciones de seguridad privada en el edificio cuando fue alcanzado por los disparos. Islam llevaba más de diez años en la fuerza y había comenzado a trabajar turnos adicionales como agente fuera de servicio.
Las otras tres víctimas, dos hombres y una mujer, aún no han sido identificadas públicamente, a la espera de que sus familias sean notificadas. Las autoridades indicaron que todas las muertes ocurrieron dentro del edificio, sin que se registraran heridos graves entre los evacuados.
Un atacante con antecedentes de salud mental
La policía confirmó que Shane Tamura había conducido desde Las Vegas hasta Nueva York en los días previos al ataque, aunque aún no está claro qué motivó su acción ni si tenía objetivos específicos. Según la comisionada Tisch, Tamura era conocido por haber tenido episodios de salud mental en el pasado, aunque no contaba con antecedentes penales.
El FBI y el Departamento de Seguridad Nacional están colaborando con las autoridades locales para reconstruir el itinerario del sospechoso, revisar sus dispositivos electrónicos y redes sociales, y determinar si actuó por motivaciones personales, ideológicas o como parte de algún trastorno psiquiátrico.
«Este fue un ataque cuidadosamente ejecutado, pero todavía no sabemos si hubo algún detonante inmediato», explicó Tisch. «Lo que sí sabemos es que cuatro personas perdieron la vida de manera brutal, y que nuestros equipos de emergencia actuaron con rapidez para evitar una tragedia aún mayor».
Reacciones y refuerzo de seguridad
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, expresó sus condolencias a las familias de las víctimas y destacó la valentía del oficial Islam. “Una vez más, nuestra ciudad llora la pérdida de vidas inocentes a manos de la violencia armada. Dirarul Islam es un héroe que murió protegiendo a otros”, dijo el alcalde.
El edificio atacado permanece cerrado y bajo custodia policial mientras se realizan peritajes y análisis forenses. Además, la ciudad ha incrementado la presencia policial en zonas comerciales y edificios de oficinas como medida preventiva, aunque no se han reportado amenazas adicionales.
En un país marcado por frecuentes tiroteos masivos, este nuevo ataque reabre el debate sobre el acceso a las armas de fuego, la salud mental y las medidas de seguridad en espacios públicos y privados. Nueva York, que en los últimos años ha reforzado su legislación contra armas ilegales, enfrenta ahora el reto de entender cómo un joven con problemas psicológicos y proveniente de otro estado pudo llevar a cabo un ataque letal en el corazón de Manhattan.
