Los taludes del Estadio vuelven para quedarse
“ESTÁ QUEDANDO CHICO”, DIJO BAUZÁ
Es intención del presidente de la AUF Sebastián Bauzá que los taludes puedan habilitarse asiduamente luego del partido Uruguay-Holanda para que en el fútbol local gane dos tribunas y los hinchas tengan una entrada netamente popular: “El estadio está quedando chico y necesitamos más asientos”, destacó el titular asociacionista.
Los taludes fueron eliminados del Estadio Centenario en el año 1993. Nacional y Flamengo jugaban la semifinal de vuelta de la Supercopa y los tricolores perdían por 3 a 0. A los 77′ el árbitro suspendió el encuentro porque una serie de proyectiles de gran tamaño fueron lanzados al campo, luego que los hinchas rompieran deliberadamente los bancos de esos sectores. Luego de ello, la Conmebol amenazó con suspender el estadio Centenario y su vicepresidente Eugenio Figueredo recomendó a Carlos Maresca, por entonces presidente de la AUF, destruir toda la estructura de asientos de hormigón armado existente en los taludes, como gesto de buena señal al organismo continental. La jugada salió bien y el Centenario no fue suspendido. En algunos partidos posteriores los taludes seguían habilitados y los aficionados permanecían parados, pero poco después debieron cerrarlos definitivamente porque la Fifa prohíbe tribunas sin asientos, más allá de que los aficionados los usen o no. La estructura de bancos de hormigón que fue destruida en 1993, había sido construida para la Copa de Oro de 1980. Antes los taludes solo eran zonas con pasto y los partidos se observaban de pie.
Desde 1993 esos sectores sólo mostraron el piso de hormigón y han permanecido sin aficionados, hasta que, una iniciativa de Sebastián Bauzá en 2009 los volvió a habilitar para el partido por el repechaje ante Costa Rica. Ahora, tras la iniciativa primero del propio titular asociacionista de habilitarlos para el partido ante Holanda y luego la de Peñarol para que se abran para el juego de mañana ante Vélez, aparece esta intención de Bauzá para que puedan abrirse cuando el partido lo amerite y en la medida que no se generen disturbios desde esas localidades, poder habilitarlos todos los fines de semana.
Bauzá apela a la comprensión de la gente y exhortó “al buen comportamiento de los hinchas en esos lugares para poder seguir teniendo una tribuna popular a un precio barato y que no tengamos que volver a cerrarlos para que allí solo se vea un desierto de cemento”.