
Rechazo en EE.UU. a las deportaciones impulsadas por Trump, según encuesta
Rechazo en EE.UU. a las deportaciones: una reciente encuesta de CNN realizada por la consultora SSRS ha revelado un marcado rechazo por parte del público estadounidense a las políticas migratorias de Trump.
En sus primeros meses de mandato, Trump ha intensificado su retórica antiinmigrante. Amplió su programa de deportaciones masivas, inauguró nuevos centros de detención y planea aumentar drásticamente el presupuesto para el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). Sin embargo, una creciente mayoría de los ciudadanos considera que estas medidas son excesivas.
El 55 % cree que Trump fue demasiado lejos con las deportaciones
Según la encuesta, el 55 % de los estadounidenses cree que Trump ha ido demasiado lejos en la deportación de inmigrantes que viven sin autorización en el país. Este porcentaje representa un aumento de diez puntos en comparación con los datos relevados en febrero. Esto indica un cambio en la opinión pública hacia una postura más crítica frente a las políticas migratorias del expresidente. Esta percepción se da en un contexto donde el debate migratorio vuelve a ocupar un lugar central en la agenda política.
Rechazo a nuevos centros de detención para inmigrantes
Otro hallazgo significativo es que el 57 % de los encuestados se opone a la construcción de nuevos centros de detención destinados a albergar hasta 100.000 inmigrantes indocumentados. Esta propuesta, que forma parte de una estrategia más amplia de Trump para endurecer la política migratoria, ha generado preocupación entre amplios sectores de la sociedad civil y los defensores de los derechos humanos. Las imágenes de niños separados de sus familias en la frontera, así como las condiciones precarias dentro de algunos centros de detención, han dejado una huella en la conciencia colectiva del país.
Mayoría también rechaza aumentar el presupuesto del ICE
Además, el 53 % de los ciudadanos se manifestó en contra de destinar miles de millones de dólares adicionales al presupuesto del ICE. Esta agencia ha sido objeto de críticas por su forma de operar durante la administración Trump. Durante su mandato, ICE fue acusada de realizar redadas indiscriminadas y de recurrir a tácticas intimidatorias que afectaron a comunidades enteras. Incluso a personas con años de residencia en el país y sin antecedentes penales.
Una ciudadanía que demanda un enfoque más humano
Estos resultados reflejan una desconexión entre las políticas migratorias de Trump y el sentir mayoritario de la población. Lejos de respaldar una gestión basada en la mano dura, los estadounidenses parecen inclinarse por un enfoque más humano, legal y ordenado para abordar la compleja situación migratoria del país. En particular, se ha consolidado una visión que reconoce el aporte económico, social y cultural de los inmigrantes. También se exige un sistema más justo y eficiente para gestionar la inmigración.
Una línea divisoria entre republicanos y demócratas
Cabe señalar que el tema migratorio sigue siendo una línea divisoria clave entre los votantes republicanos y demócratas. Por un lado, una parte del electorado conservador apoya las políticas de Trump como una forma de proteger la seguridad nacional y los empleos estadounidenses. Por otro, la mayoría de los independientes y prácticamente todos los demócratas expresan un fuerte rechazo a las medidas extremas de deportación y detención masiva.
¿Una política muy arriesgada para Trump?
El rechazo en EE.UU. a las deportaciones reflejan una tendencia clara. El endurecimiento de las políticas migratorias ya no cuenta con el respaldo mayoritario de la ciudadanía. Por el contrario, reflejan una desconexión persistente entre las decisiones del presidente y la opinión pública. A pesar del endurecimiento de las medidas, incluida la ampliación de centros de detención y el refuerzo presupuestario del ICE, una parte considerable de la ciudadanía rechaza este enfoque. El desafío para la nueva administración será gobernar en un contexto donde el respaldo popular a las políticas migratorias más estrictas es limitado y donde crece la demanda de soluciones más humanas, integrales y respetuosas de los derechos de los inmigrantes.